Comment or die

Hace algunos días estaba verdaderamente triste porque sentía que todo lo escrito aquí eran botellas al mar. Decidido a tomar cartas en el asunto se me ocurrió hacer uso de la TI para saber qué estaba pasando en el blog y puse un virtuosísimo contador (pueden ubicarlo en la sección de la derecha casi hasta abajo con el título de Guillolandeses). Sin haber pasado más que dos días descubrí que sí había gente leyendo el blog, sólo que por alguna razón nadie comenta. ¿Puede alguien escribir en los comments por qué?

Pues bien, yo ya he hablado mucho y es turno de los guillolandeses, así que:



Se preguntarán quizá ¿por qué tanto rollo con los comentarios? Pues resulta que es como si estuvieras hablandole a alguien que sencillamente no te contesta. Para prueba de que no estoy solo es esta angustia Omacia, que pronto va a desaparecer. No dejen que pase lo mismo aquí.

También agregué un mapa (abajo a la derecha junto al contador), porque checando los stats del contador, descubrí visitas a horas medio "raras", así que imaginé guillolandeses perdidos entre los husos horarios. Tal vez sea la diáspora; pronto lo sabremos.

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Para los nuevos visitantes que todavía no tramitan su cambio de nacionalidad, les recomiendo e invito a checar las entradas antiguas. Sólo hace falta ver el registro, que también se encuentra en la barra de la derecha. Están listados por fecha.

Para los néofitos que no saben donde comentar, es donde dice: "# guillolandeses alzan la voz, Haslo tú también"

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Saludos a todos y la recomendación de siempre: Sean felices!